Sigleros Montañeros en el Valle de Iruelas, una experiencia memorable

Por fin, después de anular la salida inicial por el mal tiempo, las familias que nos hemos apuntado en esta ocasión a la convocatoria de Sigleros Montañeros hemos disfrutado de un fin de semana inolvidable.

El viernes por la tarde fuimos llegando al camping “Valle de Iruelas”, montando tiendas e instalándonos en los bungalows. Siguieron las cenas en familia y las buenas charlas nocturnas.

El sábado por la mañana realizamos una ruta por la senda de la “lancha de las víboras”, una subida considerable hasta un puesto de avistamiento de aves. Los buitres nos iban sobrevolando mientras el grupo ascendía con buen ánimo, hasta que llegamos arriba para contemplar un paisaje maravilloso con el embalse del Burguillo al fondo.

Todos conseguimos realizar la subida, debo decir que impresiona comprobar como los niños más pequeños con la motivación que imprime ir en grupb7, consiguen dejarnos alucinados a los adultos y son capaces de realizar esfuerzos que de otra manera no cabría ni imaginar.

La segunda parte de la ruta fue mucho más suave. Descendimos tranquilamente por los pinares hasta llegar de nuevo al camping, no sin antes hacernos una fantástica foto de grupo subidos a unas rocas de granito que, sobre todo los más pequeños, usaban a modo de grandes columpios naturales.

De nuevo todos juntos, estuvimos comiendo en un merendero cercano. Después de comer nos acercamos andando hasta el embalse donde la mayoría pudimos darnos un baño y esquivar así los calores que nos estaban acompañando toda la jornada.

Ya en el camping estuvimos cenando todo el grupo y aprovechamos para charlar y conocernos más entre las familias. Esa noche cambiamos las charlas nocturnas por unas cuantas horas más de sueño, se notaba que la ruta de por la mañana nos había dejado a todos suaves…

La jornada del domingo estuvo también repleta de buen ambiente desde por la mañana. A las 12:00 comenzaba la actividad de piraguas en el embalse del Burguillo, nos lo pasamos genial tanto grandes como pequeños. Lo mejor para nosotros los baños que nos dimos saltando desde las rocas del embalse. Después de la comida las familias nos fuimos despidiendo y regresando a casa cada uno a su ritmo.

Lo que más recordaré a nivel personal de esta acampada con Sigleros, será el buen ambiente entre las familias, la camaradería, la colaboración y la ayuda para cualquier cosa, compartir un desayuno, montar una tienda, animarse en la subida de la ruta…El ambiente entre los niños y niñas fue muy bueno.

La organización como siempre estupenda.

También a modo personal me quedo con el haber podido conocer de una manera más cercana a algunas familias y a descubrir por primera vez a otras, algunas nuevas este curso. Sin duda es una de las grandes ventajas de Sigleros Montañeros, poderte integrar tan fácilmente y formar parte de la dinámica de un grupo que te facilita enormemente el día a día en tu cole. También hubo dos familias que no eran del cole y que quedaron encantadas con la experiencia.

Estamos tan contentos y agradecidos a los voluntarios de Sigleros Montañeros que, para la próxima, nos gustaría poder participar y colaborar más en la organización.

Aunque no lo parezca, organizar algo así lleva mucho esfuerzo y creemos que cuanto más ayuda mejor para todos.

Animamos al resto de familias del Siglo XXI a participar en las salidas mensuales y en la próxima salida de albergue y/o acampada de Sigleros Montañeros.

¡Nos vemos en la próxima!

Héctor y Amaya
(Padres de Unai e Iria)

Podéis ver más fotos en: https://drive.google.com/open?id=15OHx_3zP4rESdMSNn3A5oox5CvCrFQKH