Dos formas de ver una acampada

Como caracteriza a las acampadas de septiembre fue muy familiar, asistieron menos de 30 personas y personitas. Para sorpresa de todos se estrenaron un adolescente que a pesar de llevar muchos años en el cole nunca había venido de acampada, Yago de 2 de la ESO y una familia nueva, que proveniente del colegio Monserrat se incorporan este curso. Sigler@s entre sus señas de identidad y del colegio tiene la característica de ser ACOGEDOR, por esos les recibimos con los brazos abiertos. A continuación, nos relatan su vivencia de esta experiencia:

Son todo pros: la acampada vista por un adolescente.

Hola, soy Yago, estoy en 2º de la ESO. Es mi primer año en una acampada de Sigler@s y lo primero, quería agradecer a Patrick que esta acampada haya sido posible porque me ha gustado muchísimo, ha sido muy divertida. Fuimos al albergue Sierra Norte de Manjirón. Al llegar hicimos una ronda de nombres, nos presentamos y jugamos un partido de voleibol. Hicimos una ruta y vimos buitres y un alacrán, también fuimos a un lago. Me gustó mucho sobre todo porque fui con un amigo Mario.

El día siguiente íbamos a hacer una ruta pero llovió y a cambio hicimos tiro con arco y juegos de mesa. Aparte con todo esto consigues conocer a más gente, ya que no solo vienen del cole, sino que también viene gente de otros colegios. También tenías mucho tiempo libre. Además, la comida estaba buenísima. Es que son todo pros y ningún contra. Yo lo recomendaría porque es una experiencia muy, muy guay.

Yago Izquierdo (alumno de 2ª de la ESO)

Entendemos la crianza como una etapa de descubrir, de conocer y de compartir con los demás: la acampada vista por una familia nueva en el cole.

Venimos de otro colegio y este septiembre está siendo nuestro aterrizaje en el Siglo. Todo es nuevo tanto para nuestros hijos como para el resto de la familia. Sin embargo, creemos que no hay mejor manera de integrarse en una comunidad que formando parte de ella. Así que nos lanzamos a la primera acampada de Sigler@s Montañer@s para el curso 23/24.
Llegamos el sábado a media mañana al Albergue Sierra Norte en Manjirón y desde el minuto uno nos sentimos parte del grupo. Nada más llegar, hicimos juegos de presentación y dinámicas para romper el hielo, grandes y pequeños.
Tras dejar nuestras cosas en la cabaña y echar una partida de voleibol comimos un riquísimo potaje de garbanzos y tortilla de patata con pimientos en el comedor del albergue.

Como el tiempo acompañaba tras la comida, nos fuimos a hacer una rutilla hasta el Embalse de El Villar. Fueron 2 km. de agradable paseo donde, tanto los de tres años, como los de catorce, hasta los de cuarenta y tantos, disfrutamos cada uno a nuestra manera y ritmo. Palos, piedras, charcas e incluso un alacrán formaron parte del paseo.

Hicimos una parada de descanso a la orilla del embalse, merendola y foto de grupo. Al reiniciar la marcha nos dividimos en dos grupos, los que querían más aventura y los que nos volvimos tranquilamente paseando con los más pequeños al albergue.

Una vez de vuelta, juegos, duchas y descanso hasta la hora de la cena.
Después de cenar hicimos una velada que tuvo hueco de nuevo para todas y todos. Hasta los más pequeños de 3 y 4 años se lanzaron a contar chistes (la gominola de incentivo no tuvo nada que ver, ¿o si? 🙂 Entre partidas, canciones y juegos cooperativos llegó la hora del dormir en las cabañas.

Al día siguiente el tiempo no acompañó demasiado, pero aún así la lluvia no nos frenó para hacer del día un rato estupendo para el grupo. Después de desayunar recogimos las cabañas y nos cobijamos en un agradable salón donde hicimos grupos para jugar al Doble o al juego de los tres cerditos para los más pequeños, a partidas de Virus, Polilla Tramposa y Hombres Lobo de Castronegro para los mayores y terminamos con unas partidas de tiro con arco para todos.
La lluvia dio un rato de tregua, que algunas familias aprovecharon para dar un pequeño paseo por el pueblo. A las dos comimos de nuevo en grupo antes de volver a Madrid.

Ha sido un comienzo de curso estupendo, un fin de semana más cerca de la naturaleza, respirando aire puro, realizando deporte, jugando y, en definitiva, compartiendo momentos de diversión con familias muy diversas.

Entendemos la crianza como una etapa de descubrir, de conocer y de compartir con los demás. Gracias sigleros montañeros por la acogida,

Elena, Nico, Celina (1º ESO I.E.S Forges), Lucas y Telmo (alumnos de Infantil del Colegio Siglo XXI)