Cartas con alma para los enfermos de COVID19

13/06/2020

Durante las primeras semanas del confinamiento algunos alumnos y alumnas de secundaria han participado de una iniciativa solidaria muy sencilla pero tremendamente importante: Las cartas con alma.

Desde el área de Valores Éticos y Geografía e Historia se les propuso escribir cartas de ánimo a los enfermos de Covid19 ingresados en los hospitales madrileños. Se trata de una propuesta del Colegio de Médicos de Madrid en la que han participado miles de personas con sus textos.

Con estas cartas se pretendía hacer más llevadera los pacientes esta situación que estaban viviendo. Muchos han estado completamente solos, separados de sus familias, algunos sabían que sus familiares también estaban en otras habitaciones intubados en la UCI o que incluso se estaban muriendo solos. Ante este contexto tan duro, desconcertante e imprevisto, se intentó acercar al alumnado a estas situaciones, sabemos de algunos/as que lo han vivido de cerca. Invitarles a que pudieran aportar y compartir con las personas ingresadas algo de sus sensaciones, de sus emociones y por qué no, de su desconcierto e inquietudes. Sabíamos de su necesaria soledad, quizás para ser más justos habría que decir, de su necesario aislamiento, pero algo se podía hacer para transmitirles que no se sintieran tan solos, que precisamente lo que estaban viviendo ellos y ellas, al resto, nos conmovía y llenaba de estupor y solidaridad.

En la pequeña muestra de cartas con alma que se publica, los alumnos y alumnas del cole se presentan, les mandan mensajes de apoyo, comparten con estas personas cómo están pasando ellos está compleja situación a la que se han tenido que incorporar de repente y en la que han ido aflorando diferentes sensaciones, algunas intensas, otras contradictorias, cambiantes e infinitamente, a pesar de todo, más positivas que la de los enfermos, o simplemente les han narrado una historia que les ha podido ayudar a evadirse un rato. Sin olvidar que el esfuerzo personal por echar una mano a alguien, incluso a alguien desconocido, es un acto generoso que enriquece y llena de satisfacción a quien lo practica.
Esta y otras iniciativas, no sólo aportan y ayudan a los las reciben, también se ha intentado, que nuestros adolescentes sean conscientes y valoren las “pequeñas cosas” que crean su rutina. A veces el día a día es “aburrido” pero cuando se pierde, y más durante meses, se echa de menos y se desea que vuelva cuanto antes.

Os dejamos algunas de estas cartas que han escrito los chicos y chicas de secundaria porque merece la pena disfrutar de la calidez humana que desprenden.

Puedes seguir en redes el movimiento con el hashtag #CartasConAlma.